«El amor necesita aprenderse y descubrirse casi a diario, conformarse es el primer paso para fracasar»

Escribe Laura, al inicio de la novela, que esa historia “se la contaron hace mucho tiempo en un aeropuerto”. Y es curioso porque el 80% de ella la leí también entre dos aeropuertos y cuatro vuelos. El de ida y el de vuelta a Trondheim, en Noruega, para ser exactos. Y tengo que admitir que … «El amor necesita aprenderse y descubrirse casi a diario, conformarse es el primer paso para fracasar»